Hoy
traemos a Acción Politeia a otro pensador que indaga sobre cómo
será la sociedad del futuro. Se llama Alvin
Toffler.
Neoyorquino nacido en 1928 , Toffler ha construido a lo largo de su
carrera una sólida reputación de visionario. Preocupado por el
desarrollo de la tecnología y su influencia en las sociedades ,
anticipó
las características de la sociedad de la información llegando a
acuñar un nuevo concepto de analfabeto.
Analfabeto será, decía Toffler “aquel
que no sepa dónde ir a buscar la información que requiere en un
momento dado para resolver una problemática concreta. La persona
formada no lo será a base de conocimientos inamovibles que posea en
su mente, sino en función de sus capacidades para conocer lo que
precise en cada momento».
Y en esto tiene razón; el desarrollo de la sociedad en red nos hace
encontrar en unos segundos un extraordinario volumen de información.
Y todos podemos obtenerla al mismo tiempo. Sin embargo, evaluar esa
información y analizarla críticamente determinará la diferencia
entre unos y otros. Es lo que denomina Toffler "habilidades
o técnicas de pensamiento crítico".
Pero
Toffler erró en algunas visiones. Así ,en su best-seller de
1975 titulado "The Eco-Spasm Report",pronosticaba la
aparición de un movimiento religioso que vetaría el consumo de
carne de vacuno con lo que , al bajar la demanda, se ahorrarían
cantidades ingentes de cereales que se destinarían a acabar con el
hambre. No acertó: las chuletas campan, de momento, a sus anchas.
El propio Alvin es consciente de los márgenes de error pues huye de
la utilización de la palabra predecir y sostiene que cualquiera que
diga que puede predecir el futuro" es probablemente un
miembro del club de los charlatanes, porque los eventos humanos están
llenos de sorpresas y hechos fortuitos, de conflictos, retrocesos y
trastornos".
Aún
mostrando este error de apreciación- por cierto, muy propio en los
que hacen prospectiva,- la solvencia de Toffler es incuestionable. El
Diario del Pueblo, el periódico oficial del gobierno chino, lo
consideraba como uno de los 50 extranjeros que más influencia han
tenido en China. Por otra parte,un periódico nada sospechoso de
amarillismo – El Financial
Times
– lo definió como el “futurólogo más famoso del mundo”.
Hay
un aspecto del pensamiento de Toffler que se está materializando de
forma progresiva y sutil. Me refiero a su concepto de “
prosumidor”. Prosumidor es aquella persona que produce
bienes y servicios por los que no obtienen ingresos , pero generan un
evidente impacto económico. En esta categoría incluimos a los
voluntarios, vecinos e incluso los blogueros como yo. Sin darnos
cuenta, generamos valor en la sociedad difundiendo conocimiento o
ayudando en la puesta en marcha de actuaciones en nuestro entorno.
Anticipa Toffler que este grupo de ciudadanos tendrá cada vez
mayor peso. Y pone como ejemplo el software libre:“Linux es
el ejemplo más espectacular de un producto creado por un grupo de
jóvenes sin un pago de por medio y sin un propósito económico
inicial de hacer dinero; ahora, Linux está desafiando a Microsoft y
es un producto muy poderoso en el mercado”, dice Alvin.
Como diría
Jeremy
Rifkin nos
estamos alejando del poder tradicional o jerárquico para situarnos
en el desarrollo del poder
lateral .
Un poder
paralelo , inmediato y simétrico que marca cada vez más nuestras
relaciones como ciudadanos.
Ya es imposible entender el desarrollo de un producto o servicio sin
contar con el asesoramiento y la opinión del usuario. No tiene
sentido arribar al monte de la novedad , cual Moisés al Sinaí, y
traer las tablas de los mandamientos a un pueblo que las recibe sin
rechistar. Incluso, las instituciones más ancladas en la jerarquía
relacional, como la Administración, empiezan a orientar sus pasos
hacia las necesidades y sentimientos del ciudadano. Su opinión es
esencial para prestar mejores servicios.
También
afirma Toffler que nuestra visión del mundo cambiará dentro de
cincuenta años. El desarrollo de la ciencia
será tal que los descubrimientos sobre la biotecnología,
neurociencias y la computación nos ofrecerán realidades muy
distintas a las de hoy en día. Aún cuando
este criterio está asentado sobre sólidas obviedades- ninguna
visión es la misma en cincuenta años-; la transcendencia de los
cambios será tal que el modelo de sociedad que nos encontremos será
extraordinariamente diferente al que forjó nuestra infancia.
En
las numerosas entrevistas que se le hacen suele utilizar el plural “
nuestros trabajos” , “consideramos”, “hemos pensado”. Tal
proliferación del plural mayestático no obedece a una excesiva
valoración de si mismo, sino a la sencilla-o no tan sencilla-
circunstancia de que su mujer escribe con él sus trabajos. Por eso
me ha parecido conveniente titular esta entrada con los nombres de
Heidi y Alvin Toffler .Aún así, no acabo de entender porque ella no
concede entrevistas y pese a ser la coautora de sus libros no
da conferencias y se mantiene en un discreto segundo plano.
Volviendo
a sus pensamientos sobre la sociedad, un aspecto que me resulta
atrayente es su concepción de la educación del futuro
La
"escuela del mañana"
la conforman de forma muy diferente a la actual. Sostienen que
deberían funcionar las 24 horas del día ( me imagino que con
soportes de nuevas tecnologías) adaptándose a las necesidades de
los chicos y del entorno. E introduce un elemento de
extraordinaria riqueza: se pregunta porque las
clases deben darlas no sólo los maestros sino todos aquellos que
tengan algo para dar. En una respuesta a un
diario latinoamericano expresó al respecto “¿Por
qué no sumar a las aulas a quienes sin ser maestros, pueden
ofrecerles otras perspectivas de aprendizaje a los chicos? ¿Por qué
no sentarlos durante media hora, una hora o lo que fuere con un
piloto de avión? ¿O con un cocinero, un empleado de oficina o un
empresario? Que se genere un ida y vuelta: ¿Qué haces? ¿Cómo es
tu vida diaria? Y, más relevante aún, ¿cómo introducir a los
estudiantes al mundo actual, a la vanguardia de la tecnología de la
información, cuando los maestros conocen tanto o menos de ellas que
los alumnos? “.Por ello, os enlazo
un video sobre sus reflexiones acerca de la educación que merecen
ser analizadas.
Todo
el pensamiento de los Toffler irradia optimismo.
Los problemas energéticos, medioambientales o la superpoblación
serán solucionados , generando mejores sociedades. Y en esto estoy
de acuerdo con ellos. ¿Acaso
no es la historia de la Humanidad un afán continuo por salvar los
problemas y mejorar?. O eso creo.
------
Si
se quiere seguir la obra de los Toffler
·
El Shock Del Futuro (1970)
·
The Eco-Spasm Report (1975)
·
La tercera ola (1980)
Esta
sea quizás su obra más influyente Toffler
. Utiliza los conceptos de olas para referirse a los diferentes
períodos por los que han atravesado las civilizaciones y determinan
su grado de evolución. Así, distingue tres olas:
* La primera ola como la
revolución agrícola
* La segunda ola como la
revolución industrial. Separa la figura del productor de la del
consumidor. La uniformización, la especialización, la
sincronización, la concentración, la maximización y la
centralización son sus características derivando de forma natural
en la creación de la burocracia y las corporaciones.
* Por último, la tercera
ola es la sociedad post-industrial. Considera Toffler que ahora
estamos en esta etapa caracterizada por la sociedad de la información
.
·
Avances y premisas (1983)
·
La Empresa Flexible (1985)
·
El cambio del poder = Powershift
(1990)
·
Guerra y anti - guerra: Sobrevivir
en los albores del siglo XXI (1993)
·
La creación de una nueva
civilización : la política de la tercera ola (1996
·
La revolución de la riqueza
(2006)
Posted by Jesús
J. Ferreiro